¿Cuántas veces hemos necesitado algún adorno colorido, que no sea tóxico y que además sea económico para decorar las tortas de nuestros niños? Pues, les tengo la solución: esferas de gelatina sin sabor que podemos teñir del color que queramos. No son comestibles porque son muy duras, pero brindan ese efecto colorido y brillante. Además, no hacen daño a la salud de los niños, si acaso se las llevan a la boca.
Ingredientes:
4 cucharadas de agua
2 sobres de gelatina (7 g c/u)
Colorantes c/n
Globos pequeños c/n
Pinchos o palos de brochetas
Base de icopor para colocar los globos
Luego espolvoreamos la gelatina en el agua y la dejamos hidratar por 5 minutos.
Pasado el reposo llevar al microondas o al baño maría para licuarla. Cuando esté liquida le agregamos el colorante y retiramos la espuma que se haya formado.
Entonces, procedemos a cubrir nuestros globos con la gelatina, sumergiéndolos y dejándolos escurrir antes de ponerlos en la base para que sequen.